Del Evangelio según san Lucas 7, 1-10
[...] Cuando ya estaba cerca de la casa, el oficial romano envió unos amigos a decirle: “Señor, no te molestes, porque yo no soy digno de que tú entres en mi casa... Basta con que digas una sola palabra y mi criado quedará sano...". Jesús dijo: “Yo les aseguro que ni en Israel he hallado una fe tan grande”...
Palabra del Señor.