Del Evangelio según san Lucas 2, 41-51
[…] Al tercer día lo encontraron en el templo, sentado en medio de los doctores, escuchándolos y haciéndoles preguntas. Al verlo, sus padres se quedaron atónitos y su madre le dijo: “Hijo mío, ¿por qué te has portado así con nosotros? Tu padre y yo te hemos estado buscando llenos de angustia”. Él les respondió: “¿Por qué me andaban buscando? ¿No sabían que debo ocuparme en las cosas de mi Padre?”.
Palabra del Señor.