Ayúdame a aceptar, mi buen Jesús, las cosas que no entiendo y ponen en duda mi fe: los sufrimientos y dolores que hay en el mundo y que, a veces, debo vivir. Dame fe para creer cada día más en ti. Amén.
Ayúdame a aceptar, mi buen Jesús, las cosas que no entiendo y ponen en duda mi fe: los sufrimientos y dolores que hay en el mundo y que, a veces, debo vivir. Dame fe para creer cada día más en ti. Amén.